Rinotraqueitis infecciosa bovina (IBR: Infectious Bovine Rhinotracheitis) (dsDNA, Herpesvirales, Herpesviridae, Varicellovirus, Bovine Herpesvirus 1 -BHV-1). Diagnóstico molecular (PCR); Detección de cepas vacunales con deleción de gen de glicoproteína E (gE = U58) (secuenciación).

 

La rinotraqueítis infecciosa bovina (RIB) es una enfermedad respiratoria aguda y contagiosa del ganado bovino causada por el herpesvirus de tipo 1 (BHV-1) que afecta principalmente al aparato respiratorio y reproductor. Esta enfermedad es también conocida como rinotraqueítis infecciosa necrótica bovina, rinitis necrótica, enfermedad de la nariz roja, vulvovaginitis pustular infecciosa y exantema coital.

El herpesvirus de tipo 1 (BHV-1 o BoHV-1) es un virus altamente contagioso de la familia Herpesviridae, género Herpesvirus. Los virus que integran la familia Herpesviridae son virus con envoltura, de 200 a 300 nm de diámetro, cuyo genoma consiste en un ADN de doble cadena que varía entre 120 a 290 Kbp. La familia está conformada por tres subfamilias: Alphaherpesvirinae, Betaherpesvirinae y Gammaherpesvirinae. Los herpesvirus reconocidos en el bovino pertenecen a la subfamilia Alphaherpesvirinae o Gammaherpesvirinae.

La transmisión del virus puede producirse por contacto directo con secreciones respiratorias, oculares o fluidos vaginales procedentes de animales infectados y mediante la inhalación del virus en forma de aerosoles. Además, la transmisión puede producirse a través de la ingesta de alimentos o agua contaminados con estas secreciones, a través del semen durante la inseminación artificial o semen-secreción vaginal durante la monta natural. Asimismo puede producirse contagio indirecto a través de personas o equipos.

La rinotraqueítis infecciosa bovina (RIB), puede cursar de manera distinta en función de factores como la edad del animal infectado y su estado inmunológico. En general, esta enfermedad se presenta como un proceso gripal. En ocasiones, el proceso gripal puede derivar a una severa neumonía debido a microorganismos oportunistas como Pasteurella haemolitica u otras patologías producidas por diferentes bacterias o virus oportunistas. Con respecto a la neumonía, suelen estar involucrados el virus respiratorio sincitial bovino y el virus parainfluenza 3.

En animales jóvenes, puede cursar con diversos síntomas que incluyen fiebre, letargo, pérdida de apetito, tos, secreción nasal y ocular, rinotraqueítis necrotizante y, en los casos mortales, presencia de pseudomembranas fibrinonecróticas. Por su parte, en el ganado adulto, uno de los primeros síntomas de infección por el BHV-1 es una caída prolongada de la producción láctea. En este colectivo, la infección suele afectar al aparato reproductor, dando lugar a problemas de infertilidad o reducción de la fertilidad, aborto y malformaciones congénitas. Además, la infección por el BHV-1 puede causar vulvovaginitis pustular infecciosa, balanopostitis y conjuntivitis. En algunos casos, la enfermedad se ha asociado con metritis, endometritis, mastitis, epididimitis, dermatitis, enteritis y encefalomielitis.