Neuropatía hereditaria con parálisis por presión -HNPP- (Hereditary neuropathy with liability to pressure palsies) - Gen PMP22

 

La neuropatía hereditaria con parálisis por presión, es una alteración que afecta a los nervios periféricos, que conectan el cerebro y la médula espinal con los músculos, así como con células sensoriales que detectan el tacto, el dolor y la temperatura. En las personas con esta alteración, los nervios periféricos son inusualmente sensibles a la presión.

Los síntomas suelen comenzar durante la adolescencia o a comienzos de la edad adulta, pero pueden desarrollarse en cualquier momento desde la niñez a la edad adulta tardía e incluyen episodios recurrentes de entumecimiento, hormigueo y/o parálisis. Un episodio puede durar desde varios minutos hasta varios meses, pero la recuperación suele ser completa. Sin embargo, los incidentes repetidos pueden dar lugar a una debilidad muscular permanente o a la pérdida de la sensibilidad. Esta enfermedad también se asocia con dolor en las extremidades, especialmente en las manos. Cualquier nervio periférico puede verse afectado por un episodio de parálisis produciéndose con más frecuencia en los nervios de las muñecas, los codos y las rodillas. Los dedos, los hombros, las manos, los pies y el cuero cabelludo también pueden verse afectados. Muchas personas con esta alteración padecen el síndrome del túnel carpiano cuando está involucrado un nervio en la muñeca. La enfermedad no afecta a la esperanza de vida.

Este proceso es debido a mutaciones en el gen PMP22 (peripheral myelin protein 22), situado en el brazo corto del cromosoma 17 (17p12), o a una pérdida de una copia del gen. Este gen, codifica la proteína de la mielina periférica 22. Esta proteína se encuentra en el sistema nervioso periférico, y es un componente de la mielina, la sustancia protectora que cubre los nervios y promueve la transmisión eficiente de los impulsos nerviosos. La proteína es producida principalmente por las células de Schwann que envuelven y aíslan los nervios. En el interior de las células de Schwann, la proteína juega un papel crucial en el desarrollo y mantenimiento de la mielina. Los estudios sugieren que la proteína PMP22 es particularmente importante en la protección de los nervios frente a la presión física, ayudando a restaurar su estructura después de la compresión. El gen PMP22 también puede desempeñar un papel en el crecimiento de células de Schwann y en el proceso por el que las células maduran para llevar a cabo funciones específicas. Antes de que se convierta en parte de la mielina, la proteína se procesa y conserva en el retículo endoplasmático y en el aparato de Golgi.

Se han descrito al menos 123 mutaciones en el gen PMP22 de las cuales: mutaciones sin sentido (49), mutaciones de corte y unión -splicing- (8), deleciones pequeñas (19), inserciones pequeñas (3), deleciones mayores (20), inseciones / duplicaciones mayores (18) y reagrupamientos complejos (6). La mutación más frecuente en el gen PMP22, provoca una pérdida de una copia del gen en cada célula, lo que probablemente disminuye la cantidad de proteína de mielina periférica 22 disponible para la producción de mielina, o se produce una proteína anormalmente pequeña, que se descompone rápidamente. Otras mutaciones cambian uno de los aminoácidos que se encuentran en las proteínas de la mielina periférica 22, haciendo que la proteína sea inestable. Una reducción en la cantidad de proteína estable da lugar a la pérdida de la mielina. Como consecuencia, algunas cubiertas protectoras de mielina pueden volverse inestables, lo que da lugar a un aumento de la sensibilidad a la presión sobre los nervios.

La neuropatía hereditaria con parálisis por presión se hereda con un patrón autosómico dominante, lo que significa que una copia del gen alterado en cada célula es suficiente para expresar la enfermedad.

Pruebas realizadas en IVAMI: en IVAMI realizamos la detección de mutaciones asociadas  con neuropatía hereditaria con parálisis por presión, mediante la amplificación completa por PCR de los exones del gen PMP22, y su posterior secuenciación.

Muestras recomendadas: sangre extraída con EDTA para separación de leucocitos sanguíneos, o tarjeta impregnada con muestra de sangre desecada (IVAMI puede enviar por correo la tarjeta para depositar la muestra de sangre).