Simpson-Golabi-Behmel, Síndrome de …, (Simpson-Golabi-Behmel syndrome) - Gen GPC3  

El síndrome de Simpson-Golabi-Behmel (SGBS) o síndrome de Simpson, es una alteración que afecta a muchas partes del organismo y afecta principalmente a los varones. Esta afectación, es un síndrome de sobrecrecimiento, lo que significa que los niños afectados son considerablemente más grandes de lo normal al nacer (macrosomía) y continúan creciendo y ganando peso a un ritmo inusual. Los otros signos y síntomas del síndrome varían ampliamente. Los casos más graves pueden fallecer antes del nacimiento o durante la infancia, mientras que los afectados leves suelen vivir hasta la edad adulta.

Las personas con el síndrome de Simpson-Golabi-Behmel tienen rasgos faciales característicos, incluyendo hipertelorismo ocular, macrostomía, macroglosia que puede tener un profundo surco central, una nariz ancha con la punta hacia arriba y anomalías que afectan el paladar. Otras características del síndrome implican el tórax y el abdomen. Los niños afectados pueden nacer con uno o más pezones extra, una apertura anormal en la musculatura de la pared abdominal (diástasis de rectos), hernia umbilical o hernia diafragmática, permitiendo que el estómago y los intestinos se desplacen hacia el tórax, lo que a su vez conlleva el desplazamiento del corazón y los pulmones.

Esta alteración también puede causar defectos cardíacos, malformaciones renales, hepatoesplenomegalia y anomalías esqueléticas. Además, el síndrome puede afectar el desarrollo del sistema gastrointestinal, sistema urinario y los genitales. Mientras que algunas personas tienen una inteligencia normal, otras presentan una leve o severa discapacidad intelectual. Alrededor del 10 por ciento de las personas con síndrome de Simpson-Golabi-Behmel pueden desarrollar tumores cancerosos o no cancerosos en la primera infancia. Los tumores más habituales son el tumor renal de Wilms y el neuroblastoma cerebral.

Este proceso puede ser debido a mutaciones en el gen GPC3 (glypican 3), situado en el brazo largo del cromosoma X (Xq26.1), que codifica la proteína glipicano-3, implicada en la regulación del crecimiento y la proliferación celular. Varios estudios han encontrado que el glipicano-3 interactúa con otras proteínas en la superficie de las células para restringir la proliferación celular. Se piensa que, en algunos tipos de células, glipicano 3 actúa como un supresor tumoral, evitando que las células crezcan y se dividan de forma incontrolada para formar un tumor canceroso. Además, esta proteína puede inducir la apoptosis en algunos tipos de células cuando ya no son necesarias, lo que puede ayudar a mantener el crecimiento bajo control. Aunque esta proteína se conoce por su función inhibidora del crecimiento y la división celular, en ciertos tipos de células, como las células hepáticas, el glipicano 3 puede interactuar con factores de crecimiento para promover el crecimiento celular y la división celular.

Se han identificado más de 50 mutaciones en el gen GPC3 en individuos con síndrome de Simpson-Golabi-Behmel. Las mutaciones en este gen pueden eliminar parte o todo el gen, o alterar la estructura de glipicano 3. Estas mutaciones impiden a la proteína la realización de sus funciones habituales, lo que puede contribuir a una mayor tasa de crecimiento y división celular antes del nacimiento. Se han asociado cambios en el gen GPC3 con varias formas de cáncer. En particular, el carcinoma hepatocelular. El aumento de la expresión de genes puede conducir a un crecimiento incontrolado de células y la división celular en las células hepáticas, lo que puede resultar en el desarrollo de un tumor canceroso. Por otro lado, se ha encontrado en algunos tipos de cáncer de ovario, de mama, de colon, y mesoteliomas, una disminución en la expresión del gen.

En algunos individuos con síndrome de Simpson-Golabi-Behmel no se han identificado mutaciones en el gen GPC3 y la causa del desarrollo de la enfermedad se desconoce. Se ha descrito un proceso con características que se superponen a las del síndrome de Simpson-Golabi-Behmel, al que han denominado síndrome de Simpson-Golabi-Behmel tipo 2 (SGBS2). Los signos y síntomas de este síndrome son más graves que los que tienen lugar en el síndrome de Simpson-Golabi-Behmel, y los afectados viven solo durante la infancia. Es probable que el síndrome de Simpson-Golabi-Behmel tipo 2 tenga una causa genética diferente.

Este proceso se hereda de forma recesiva ligada al sexo, ya que el gen se localiza en el cromosoma X. Al tener los varones un único cromosoma X, la alteración de este único gen es suficiente para que se manifieste el proceso. En las mujeres, al tener dos cromosomas X, la mutación debe ocurrir en ambos cromosomas para provocar el síndrome. Por esta razón, los varones se afectan con mayor frecuencia que las mujeres, ya que es muy raro que éstas tengan las dos copias del gen, en ambos cromosomas X, alterados. Una característica de estos procesos ligados al cromosoma X, es que los padres no pueden transmitir este carácter genético a sus hijos.

 

Pruebas realizadas en IVAMI: en IVAMI realizamos la detección de mutaciones asociadas con el síndrome de Simpson-Golabi-Behmel, mediante la amplificación completa por PCR de los exones del gen GPC3, y su posterior secuenciación.

Muestras recomendadas: sangre extraída con EDTA para separación de leucocitos sanguíneos, o tarjeta impregnada con muestra de sangre desecada (IVAMI puede enviar por correo la tarjeta para depositar la muestra de sangre).