Gangliosidosis GM2, variante AB (GM2-gangliosidosis, AB variant) – Gen GM2A.

La gangliosidosis GM2, variante AB, es una alteración hereditaria poco común que destruye progresivamente las células nerviosas en el cerebro y la médula espinal. Los signos y síntomas de la variante AB se manifiestan en la infancia. Los niños afectados tienen un desarrollo aparentemente normal hasta la edad de 3 a 6 meses, cuando su desarrollo se ralentiza y los músculos esqueléticos se debilitan. Los niños afectados pierden habilidades motoras tales como girarse, sentarse y gatear. También desarrollan una reacción de sobresalto exagerada a ruidos fuertes. A medida que la enfermedad progresa, los niños con la variante AB presentan convulsiones, pérdida de visión y audición, discapacidad intelectual y parálisis. Una anomalía ocular que consiste en una mancha de color rojo cereza, es característica de esta enfermedad. En general, los niños con la variante AB viven sólo en la primera infancia.

Este proceso es debido a mutaciones en el gen GM2A, situado en el brazo largo del cromosoma 5 (5q33.1). Este gen, codifica una proteína denominada activador gangliósido GM2. Esta proteína es necesaria para la función normal de la enzima beta-hexosaminidasa A, que desempeña un papel crítico en el sistema nervioso central. La enzima beta-hexosaminidasa A y la proteína activadora gangliósido GM2 actúan juntas en los lisosomas. En el interior de los lisosomas, la proteína activadora se une a una sustancia grasa denominada gangliósido GM2 y se presenta a beta-hexosaminidasa A para su descomposición.

Sólo unas pocas mutaciones en el gen GM2A se han identificado en las personas con gangliosidosis GM2, variante AB. Algunas de estas mutaciones cambian aminoácidos en el activador gangliósido GM2. Otras mutaciones eliminan una pequeña cantidad de ADN del gen GM2A. Estos cambios genéticos dan lugar a una proteína inestable que se degrada rápidamente, o inhiben la codificación de proteína funcional. Sin el activador gangliósido GM2, beta-hexosaminidasa A es incapaz de descomponer gangliósido GM2. Como consecuencia, esta sustancia se acumula a niveles tóxicos, particularmente en las células nerviosas en el cerebro y la médula espinal. El daño progresivo debido a la acumulación de gangliósido GM2 da lugar a la destrucción de estas células, lo que subyace a los signos y síntomas de la gangliosidosis GM2 variante AB.

Esta enfermedad se hereda con un patrón autosómico recesivo, es decir, ambas copias del gen en cada célula deben tener las mutaciones para que se exprese la alteración. Los padres de un individuo con una enfermedad autosómica recesiva tienen una copia del gen mutado, pero por lo general no muestran signos y síntomas de la enfermedad.

Pruebas realizadas en IVAMI: en IVAMI realizamos la detección de mutaciones asociadas  con gangliosidosis GM2 variante AB, mediante la amplificación completa por PCR de los exones del gen GM2A, y su posterior secuenciación.

Muestras recomendadas: sangre extraída con EDTA para separación de leucocitos sanguíneos, o tarjeta impregnada con muestra de sangre desecada (IVAMI puede enviar por correo la tarjeta para depositar la muestra de sangre).