Angullicola crassus (Angulliculoides crassus) - Diagnóstico molecular (PCR); Identificación molecular (PCR y secuenciación).
 
Información 24-07-2014.

       Angullicola crassus (Angulliculoides crassus) es un nematodo parásito que en su estado adulto habita en la vejiga natatoria de las anguilas (Anguilla spp.). Este helminto se disemina fácilmente en la población de anguilas cuando penetra en una masa de agua. Su hospedador natural es la anguila japonesa (Anguilla japonica). En Europa, probablemente, se introdujo con anguilas importadas de Sudeste asiático, posiblemente de Taiwán en 1980. En unos años se alcanzaron altas tasas de infestación en la anguila europea (Anguilla anguilla) existiendo descripciones de su hallazgo en Alemania e Italia (1982), Dinamarca (1986), Suecia (1987), Austria (1987), Noruega (1983), Latvia (1988) y España (1987), entre otros países. Una vez introducido en un río o lago, puede extenderse rápidamente a la población de anguilas, gracias a la elevada tasa de reproducción y a la escasa especificidad de hospedadores intermediarios, por lo que se considera uno de los peligros para las anguilas autóctonas. La introducción de esta parasitación en anguilas autóctonas, o en granjas de anguilas, ocurre como consecuencia de introducir anguilas infectadas, de la diseminación de hospedadores paraténicos infectados (por ejemplo determinadas especies de peces parasitados), de cambios de agua introduciendo agua que contenga larvas, de la introducción de crustáceos microscópicos (copépodos) parasitados, como puede ocurrir con la liberación de agua de lastre de los tanques de buques, etc.

       En las hembras adultas, una vez fecundadas, al ser ovovivíparas, los huevos eclosionan en el interior de las hembras, y éstas liberan la larva fase 1 (L1) en la vejiga natatoria. En esta vejiga mudan a larva fase 2 (L2). Esta fase larvaria pasa desde la vejiga natatoria a la faringe, y desde ésta alcanzan el tubo digestivo, siendo eliminadas con las heces de las anguilas. Una vez las larvas fase 2 (L2) alcanzan el agua, se encuentran en ella y en el sedimento, donde pueden sobrevivir largo tiempo en aguas dulces, y algo menos en aguas saladas. Esta larva fase 2 (L2) pueden ser ingeridas por su hospedador intermediario habitual, o por algún hospedador paraténico, donde darán lugar a la fase larvaria 3 (L3). Sus hospedadores intermediarios habituales son varias especies de pequeños crustáceos (copépodos). En estos hospedadores intermediarios maduran hasta alcanzar la fase 3 de larva infectiva (L3). El hospedador intermediario es ingerido por las anguilas, y desde su tubo digestivo migran hasta alcanzar la vejiga natatoria, donde dan lugar a la larva fase 4 (L4), que madurará a adultos. Otros organismos vivos insectos, moluscos, anfibios, peces, etc., pueden actuar como hospedadores paraténicos.

       Los factores que favorecen su dispersión son: larga supervivencia de fases libres larvarias, elevada fecundidad, alta tasa reproductora, y receptividad de varios hospedadores.
       
       Las anguilas infectadas, como consecuencia de la presencia de las larvas y/o de los adultos, sufren una inflamación crónica de la vejiga natatoria, que puede llegar a presentar hemorragias, áreas de necrosis, colapso e infecciones secundarias, convirtiéndose la vejiga natatoria en una masa tisular no funcional, lo que les provoca una disminución de su crecimiento y un aumento de la mortalidad. La alteración de la vejiga natatoria afecta la migración retrógrada a sus lugares de cría, afectándose la población natural de anguilas. Esta afectación depende de la intensidad de la parasitación. Las anguilas muy infectadas tienen mayor riesgo de ser capturadas por sus depredadores, como los cormoranes. En las granjas de cría de anguilas, provoca una reducción en la tasa de crecimiento, que puede conllevar su mortalidad, y como consecuencia crea un problema económico.

       Como medidas de control se ha propuesto el control de entrada de peces infectados en islas, la filtración del agua para evitar la penetración de hospedadores intermediarios parasitados, y el tratamiento del agua utilizada para los cultivos con algunos productos como levamisol, metrifonato, flumequina, oxitetraciclina. Algunos de estos tratamientos no son prácticos por su coste y la necesidad de su aplicación repetida. Una alternativa que se ha considerado es aumentar la salinidad para que las larvas fase 2 (L2) disminuyan su supervivencia.

Pruebas realizadas en IVAMI:

  • En anguilas: detección de adultos y/o larvas en vejiga natatoria, mediante disección, observación macroscópica y microscópica, y confirmación por identificación molecular mediante secuenciación del gen de citocromoxidadasa 1 (CO1).
  • En copépodos separados de agua por filtración: detección de parasitación con larvas de fase 3 (L3), mediante observación microscópica y confirmación por identificación molecular mediante secuenciación del gen de citocromoxidadasa 1 (CO1).
  • En hospedadores paraténicos (p. ej. Pseudorasbora  parva u otros): detección de fase larvaria 3 (L3), mediante observación microscópica de tejidos digeridos con enzimas, e identificación molecular mediante secuenciación del gen de citocromoxidadasa 1 (CO1).

Plazo de entrega de resultados    

    Será aproximadamente de quince días desde la recepción de la muestra en nuestro laboratorio. Si disponemos antes de los resultados se lo comunicaríamos.  

Conservación y envío de la muestra:

     Refrigerada (preferido) durante menos de 2 días.
     Congelada: más de 2 días.

Coste de las pruebas: consultar a ivami@ivami.com.