Miopatía envuelta (Cap myopathy) – Genes ACTA1, TPM2, o TPM3.

La miopatía envuelta es una enfermedad que afecta principalmente a los músculos esqueléticos. Las personas con miopatía envuelta tienen miopatía e hipotonía en todo el organismo sin embargo, los músculos de la cara, el cuello y las extremidades son los más afectados. Esta debilidad muscular, que comienza en el nacimiento o durante la infancia, puede empeorar con el tiempo.

Otros signos y síntomas de la enfermedad pueden incluir dificultades para tragar y retraso en el desarrollo de las habilidades motoras, tales como sentarse, gatear, levantarse y caminar. Estos individuos pueden caerse con frecuencia, cansarse fácilmente, y tener dificultad para correr, subir escaleras o saltar. En algunos casos, la enfermedad puede afectar a los músculos respiratorios. Estas dificultades respiratorias pueden ser potencialmente mortales. Además, las personas con miopatía envuelta pueden tener paladar duro arqueado, ptosis palpebral, y una cara alargada. Algunos individuos afectados desarrollan lordosis o escoliosis.

Este proceso es debido a mutaciones en los genes ACTA1, TPM2 y ??TPM3. Estos genes codifican proteínas que desempeñan papeles importantes en los músculos esqueléticos.

El gen ACTA1, situado en el brazo largo del cromosoma 1 (1q42.13), codifica una proteína denominada actina alfa (α). Las proteínas actina son importantes para el movimiento celular y la contracción muscular. Estas proteínas también contribuyen a mantener el citoesqueleto. La proteína codificada por el gen ACTA1, juega un papel importante en los músculos esqueléticos. Dentro de las células del músculo esquelético, es un componente esencial de los sarcómeros. Los sarcómeros se componen de filamentos delgados compuestos de actina y de filamentos gruesos compuestos de miosina. Esta unión les permite moverse uno respecto al otro de modo que los músculos pueden contraerse. Se ha identificado al menos 1 mutación del gen ACTA1 en las personas con miopatía envuelta. Esta mutación reemplaza el aminoácido metionina por el aminoácido valina en la posición 47 de la proteína, Met47Val o M47V. La proteína aleterada puede interferir con el conjunto adecuado de filamentos delgados. La estructura alterada del filamento probablemente deteriora la capacidad de los músculos esqueléticos para contraerse, lo que conduce a debilidad muscular y los otros signos y síntomas de la enfermedad.

El gen TPM2, situado en el brazo corto del cromosoma 9 (9p13), codifica la proteína tropomiosina beta (β), que es parte de la familia de proteínas tropomiosina. Estas proteínas regulan la contracción muscular mediante el control de la unión de dos proteínas musculares, miosina y actina. En las células no musculares, las proteínas tropomiosina desempeñan un papel en el control de la forma celular. Estas interacciones son esenciales para estabilizar y  mantener los  sarcómeros en el interior de las células musculares. Se han identificado al menos 3 mutaciones del gen TPM2 en las personas con miopatía envuelta. Estas mutaciones eliminan o duplican material genético en el gen TPM2 o reemplazan aminoácidos en la secuencia de la proteína β-tropomiosina. Aunque los efectos específicos de estas mutaciones genéticas no están claros, se cree que pueden interferir en la vinculación normal de actina-miosina, deteriorando la contracción muscular y dando lugar a la debilidad muscular que se produce en la enfermedad.

El gen TPM3, situado en el brazo largo del cromosoma 1 (1q21.2), codifica una proteína denominada tropomiosina alfa-3 de cadena, que es parte de la familia de proteínas tropomiosina. Estas proteínas regulan la contracción muscular mediante el control de la unión de dos proteínas musculares, miosina y actina. En las células no musculares, las proteínas tropomiosina desempeñan un papel en el control de la forma celular. La proteína codificada por el gen TPM3 se encuentra en los músculos esqueléticos. El músculo esquelético se compone de dos tipos de fibras musculares: tipo I (fibras de contracción lenta) y tipo II (fibras de contracción rápida). Esta proteína se encuentra solamente en las fibras de tipo I. Las fibras de tipo I son el componente principal de los músculos esqueléticos que son resistentes a la fatiga. SE han identificado al menos 2 mutaciones genéticas TPM3 en las personas con miopatía envuelta. Estas mutaciones reemplazan el aminoácido arginina por los aminoácidos cisteína o histidina en la posición 168 de la secuencia de la proteína, Arg168Cys o Arg168His (R168C o R168H). Aunque no están claros los efectos específicos de estas mutaciones genéticas, es probable que puedan interferir con la vinculación normal de actina-miosina, deteriorando la contracción muscular y dando lugar a la debilidad muscular que se produce en la enfermedad.

Esta enfermedad se hereda con un patrón autosómico dominante, lo que significa que una copia del gen alterado en cada célula es suficiente para expresar la enfermedad. Sin embargo, la mayoría de los casos no se heredan, sino que son debidos a nuevas mutaciones en el gen y ocurren en personas sin antecedentes de la enfermedad en su familia.

Pruebas realizadas en IVAMI: en IVAMI realizamos la detección de mutaciones asociadas  con miopatía envuelta, mediante la amplificación completa por PCR de los exones de los genes ACTA1, TPM2 y ??TPM3, respectivamente, y su posterior secuenciación.

Muestras recomendadas: sangre extraída con EDTA para separación de leucocitos sanguíneos, o tarjeta impregnada con muestra de sangre desecada (IVAMI puede enviar por correo la tarjeta para depositar la muestra de sangre).