Fibrosis pulmonar idiopática (Idiopathic pulmonary fibrosis) - Genes TERC y TERT           

La fibrosis pulmonar idiopática es una enfermedad pulmonar crónica progresiva, caracterizada por la formación de tejido cicatricial (fibrosis), lo que impide la difusión del oxígeno desde los alvéolos a la sangre. En general, la enfermedad afecta a personas entre los 50 y 70 años de edad.

Los signos y síntomas más frecuentes de la fibrosis pulmonar idiopática son la sensación de falta de aire, acompañada de tos seca y persistente. Muchos individuos afectados también manifiestan una pérdida de apetito y pérdida de peso gradual. Algunas personas con la enfermedad desarrollan los extremos distales de los dedos de las manos y los pies ensanchados y redondeados (dedos en palillo de tambor). Con el tiempo, la cicatrización de los pulmones aumenta hasta que los pulmones ya no pueden proporcionar suficiente oxígeno a los órganos y tejidos del organismo. Algunas personas desarrollan otras alteraciones pulmonares graves, como el cáncer de pulmón, embolia pulmonar, neumonía o hipertensión pulmonar. La mayoría de los individuos afectados sobreviven entre 3 a 5 años después de su diagnóstico. Sin embargo, el curso de la enfermedad es muy variable ya que algunas personas afectadas enferman gravemente a los pocos meses, mientras que otras pueden vivir con la enfermedad durante una década o más. En la mayoría de los casos, la enfermedad ocurre de forma esporádica, afectando a una sola persona de una familia. Sin embargo, un pequeño porcentaje de personas con esta enfermedad tienen al menos otro miembro de la familia afectada. Cuando la enfermedad ocurre en varios miembros de la misma familia, se conoce como fibrosis pulmonar familiar.

La causa de la fibrosis pulmonar idiopática es desconocida, aunque la enfermedad probablemente es debida a una combinación de factores genéticos y ambientales. Es probable que los cambios genéticos aumenten el riesgo de desarrollar la fibrosis pulmonar idiopática, junto a la exposición a ciertos factores ambientales. Los factores de riesgo ambientales que podrían contribuir a la fibrosis pulmonar idiopática incluyen la exposición al polvo de madera o de metales, las infecciones virales, ciertos medicamentos y el tabaquismo.

Los cambios en varios genes han sido sugeridos como factores de riesgo de fibrosis pulmonar idiopática. La mayoría de estos cambios genéticos representan sólo una pequeña proporción de los casos. Sin embargo, las mutaciones en ciertos genes como los genes TERC, situado en el brazo largo del cromosoma 3 (3q26), y TERT, situado en el brazo corto del cromosoma 5 (5p15.33) se han encontrado en aproximadamente el 15 % de todos los casos de fibrosis pulmonar familiar y un menor porcentaje de casos de fibrosis pulmonar idiopática esporádica.

Estos genes, codifican la síntesis de un componente de un enzima llamado telomerasa. La telomerasa mantiene unas estructuras llamadas telómeros, que se componen de segmentos repetidos de ADN situados en los extremos de los cromosomas. Los telómeros protegen los cromosomas de la adherencia entre ellos de manera anormal o de que se descompongan. En la mayoría de las células, los telómeros se vuelven progresivamente más cortos a medida que la célula se divide. Después de un cierto número de divisiones celulares, los telómeros se vuelven tan cortos que hace que las células dejen de dividirse o se autodestruyan. La telomerasa contrarresta el acortamiento de los telómeros mediante la adición de pequeños segmentos repetidos de ADN a los extremos de los cromosomas cada vez que la célula se divide.

Se han identificado varias mutaciones en el gen TERC y al menos 23 mutaciones en el gen TERT en personas con fibrosis pulmonar idiopática. Las mutaciones en los genes TERC y TERT reducen o eliminan la función de la telomerasa, lo que provoca que los telómeros se vuelvan excesivamente cortos conforme las células se dividen, con lo que las células que recubren el interior de los pulmones dejan de dividirse o mueren prematuramente. Sin embargo, no se conoce cómo los telómeros acortados contribuyen a la formación de la fibrosis y el daño pulmonar progresivo característico de la fibrosis pulmonar idiopática.

La mayoría de los casos de fibrosis pulmonar idiopática son esporádicos y ocurren en personas sin antecedentes de la enfermedad en su familia. En otros casos, la enfermedad parece tener un patrón de herencia autosómico dominante, lo que significa que una copia de un gen alterado en cada célula es suficiente para expresar la enfermedad. Sin embargo, algunas personas que heredan el gen alterado nunca desarrollan las características de la fibrosis pulmonar familiar, hecho denominado penetrancia reducida. No está claro por qué algunas personas con un gen mutado desarrollan la enfermedad y otras personas con el gen mutado no.

Pruebas realizadas en IVAMI: en IVAMI realizamos la detección de mutaciones asociadas  con fibrosis pulmonar idiopática, mediante la amplificación completa por PCR de los exones de los genes  TERC y TERT, respectivamente, y su posterior secuenciación.

Muestras recomendadas: sangre extraída con EDTA para separación de leucocitos sanguíneos, o tarjeta impregnada con muestra de sangre desecada (IVAMI puede enviar por correo la tarjeta para depositar la muestra de sangre).