Alteración congénita de la glicosilación tipo Ia (Congenital disorder of glycosylation type Ia) – Gen PMM2.

La alteración congénita de la glucosilación tipo Ia (CDG-Ia), también conocida como deficiencia de fosfomanomutasa-2, es una enfermedad hereditaria que afecta a muchas partes del organismo. El tipo y la gravedad de los problemas asociados con la enfermedad varían ampliamente entre los individuos afectados, a veces incluso entre miembros de una misma familia.

Los individuos con CDG-Ia suelen presentar signos y síntomas de la enfermedad durante la infancia como hipotonía, pezones retraídos, una distribución anormal de la grasa, estrabismo, retraso en el desarrollo y retraso del crecimiento. Con frecuencia, estos niños también tienen un cerebelo subdesarrollado. En ocasiones, los individuos afectados tienen rasgos faciales distintivos que pueden incluir una frente alta, una cara triangular, orejas grandes y un labio superior delgado. Otros síntomas adicionales pueden incluir convulsiones, derrame pericárdico y trastornos de coagulación sanguínea. Alrededor del 20% por ciento de los niños afectados no sobreviven más allá del primer año de vida debido a un fallo multiorgánico. Los casos más graves de alteración congénita de la glucosilación tipo Ia se caracterizan por la hidropesía fetal. La mayoría de los recién nacidos con hidropesía fetal nacen muertos o mueren poco después del nacimiento.

Las personas con CDG-Ia que sobreviven a la infancia pueden tener discapacidad intelectual moderada e incapacidad para caminar de forma independiente. Las personas afectadas también pueden presentar letargo y parálisis temporal. En general, la recuperación de estos episodios se produce a lo largo de unas semanas a varios meses. Durante la adolescencia o la edad adulta, los individuos presentan neuropatía periférica, cifoescoliosis, ataxia y contracturas. Algunas personas afectadas tienen una alteración ocular denominada retinitis pigmentosa que provoca la pérdida de la visión. Las mujeres con CDG-Ia tienen hipogonadismo hipergonadotrópico, que afecta a la codificación de hormonas que dirigen el desarrollo sexual. Como consecuencia, estas mujeres no pasan por la pubertad. Por su parte, los varones afectados tienen una pubertad normal, pero a menudo tienen testículos pequeños.

La alteración congénita de la glucosilación tipo Ia (CDG-Ia), es debida a mutaciones en el gen PMM2, situado en el brazo corto del cromosoma 16 (16p13). Este gen, codifica la enzima fosfomanomutasa (PMM), que está implicada en la glucosilación, gracias a la cual, unos oligosacáridos se unen a las proteínas. La glucosilación modifica proteínas para que puedan realizar una mayor variedad de funciones.

Se han identificado más de 100 mutaciones en el gen PMM2 en las personas con la enfermedad. Estas mutaciones cambian la estructura de la enzima PMM de diferentes maneras. Sin embargo, todas las mutaciones parecen dar lugar a una reducción de la actividad de la enzima. Esta disminución de la actividad de la enzima PMM provoca una deficiencia de PIB-manosa dentro de las células. Como resultado, no hay suficiente manosa activada para formar oligosacáridos. La glucosilación no puede llevarse a cabo con normalidad porque se codifican oligosacáridos incorrectos. Los signos y síntomas en CDG-Ia son probablemente debidos a la codificación de proteínas glucosiladas de manera incorrecta en muchos órganos y tejidos.

Esta enfermedad se hereda con un patrón autosómico recesivo, es decir, ambas copias del gen en cada célula deben tener las mutaciones para que se exprese la alteración. Los padres de un individuo con una enfermedad autosómica recesiva tienen una copia del gen mutado, pero por lo general no muestran signos y síntomas de la enfermedad.

Pruebas realizadas en IVAMI: en IVAMI realizamos la detección de mutaciones asociadas  con alteración congénita de la glucosilación tipo Ia, mediante la amplificación completa por PCR de los exones del gen PMM2, y su posterior secuenciación.

Muestras recomendadas: sangre extraída con EDTA para separación de leucocitos sanguíneos, o tarjeta impregnada con muestra de sangre desecada (IVAMI puede enviar por correo la tarjeta para depositar la muestra de sangre).