Enterocytozoon bieneusi (Microsporidiosis) - Diagnóstico molecular (PCR)
Enterocytozoon bieneusi es un microorganismo intracelular obligado perteneciente al Phylum Microsporidia, género Encephalitozoon, actualmente considerado en el Reino Fungi, con una distribución mundial. Los Microsporidia infectan a un amplio rango de vertebrados e invertebrados, incluyendo a personas, especialmente a las inmunodeficientes como consecuencia de la infección por VIH. La especie Enterocytozoon bieneusi afecta principalmente al ganado porcino, si bien puede afectar a otros animales como peces, aves, ganado y otros mamíferos, incluyendo a las personas. La infección por Enterocytozoon bieneusi causa una enfermedad denominada microsporidiosis.
El ciclo biológico de este microorganismo implica un hospedador donde se multiplica. La forma infecciosa de Enterocytozoon bieneusi es una espora resistente que puede sobrevivir durante un largo tiempo en el medio ambiente. Las esporas son uninucleadas, de 1,1 a 1,6 μm x 0,7 a 1,0 μm, y con un túbulo polar de 5 a 7 volutas. Una vez en el organismo del hospedador, Enterocytozoon bieneusi se localiza en el intestino delgado y en el epitelio de los conductos biliares. En el interior del organismo, la espora inyecta el esporoplasma infeccioso en la célula huésped eucariota a través del túbulo polar. En el interior de la célula, el esporoplasma se multiplica ya sea por fisión binaria o fisión múltiple. Los microsporidios se desarrollan por esporogonia para madurar las esporas en el citoplasma o en el interior de la vacuola parasitófora. Durante la esporogonia, se forma una pared gruesa alrededor de cada espora, que proporciona resistencia a las condiciones ambientales adversas. Una vez que las esporas aumentan en número y colonizan completamente el citoplasma de las células del hospedador, la membrana celular se rompe y libera las esporas. Estas esporas maduras libres pueden infectar nuevas células, continuando así el ciclo.
La transmisión de Enterocytozoon bieneusi se produce a través de la ingestión o inhalación de esporas presentes en agua contaminada, secreciones o exudados corporales, alimentos contaminados con materia fecal, así como por vía transplacentaria.
La infección por Enterocytozoon bieneusi generalmente causa daños mínimos. La infección de los enterocitos del intestino delgado por Enterocytozoon bieneusi produce vacuolización de las células parasitadas, desprendimiento de células de la vellosidad, citolisis y degeneración de enterocitos. Así mismo, genera atrofia de las vellosidades, hiperplasia de criptas y la formación de un infiltrado linfocítico, de macrófagos y plasmocitos, una respuesta de tipo granulomatoso, con una porción central de necrosis. Además, induce alteraciones en la absorción de lípidos y carbohidratos. Como consecuencia del proceso provoca una diarrea crónica grave, especialmente en los inmunodeficientes, como los infectados por VIH. En casos raros, la infección puede diseminarse más allá del tracto digestivo y producir una diseminación sistémica, con la invasión de los pulmones, los riñones, los ojos, el hígado y el sistema nervioso central. En todos ellos, se produce una respuesta inflamatoria granulomatosa y citolisis.
En individuos inmunodeprimidos como personas con VIH, infecta principalmente el intestino delgado, pudiendo causar microsporidiosis diseminada en el tracto gastrointestinal. Se considera que el estado inmunológico y la presencia de otras deficiencias parecen ser determinantes en el riesgo de infección por Enterocytozoon bieneusi, por lo que, aunque la infección puede presentarse en pacientes inmunocompetentes, la microsporidiosis afecta más frecuentemente a individuos inmunocomprometidos, especialmente pacientes con SIDA, ancianos, diabéticos, individuos con transplantes y con neoplasias malignas.
Pruebas recomendadas para el diagnóstico:
El diagnóstico se basa en la identificación microscópica, la detección de anticuerpos, o los métodos de diagnóstico molecular (PCR). Los métodos moleculares (PCR), ofrecen la ventaja de proporcionar un diagnóstico rápido y específico.
El diagnóstico ha estado basado en una combinación de signos de deficiencia neurológica con detección de esporas en tejidos afectados, o en las heces teñidas con colorantes fluorescentes, junto con títulos elevados de anticuerpos. La histopatología ha sido el método de diagnóstico estándar utilizando métodos inmunohistoquímicos para establecer el diagnóstico de encefalitis granulomatosa junto con nefritis intersticial.
Es importante diferenciar Encephalitozoon de Enterocytozoon porque los tratamientos son distintos (Encephalitozoon puede tratarse con albendazol y Enterocytozoon con fumagilina).
Por tales razones, los métodos moleculares (PCR) son los recomendados actualmente.
Pruebas realizadas en IVAMI:
- Diagnóstico molecular (PCR), para detectar ADN de Enterocytozoon bieneusi.
Muestra recomendada:
- Heces.
- Muestras de otros tejidos afectados
Conservación y envío de la muestra:
- Refrigerada (preferido) durante menos de 2 días.
- Congelada: más de 2 días (sólo para pruebas de diagnóstico molecular).
Plazo de entrega:
- Diagnóstico molecular (PCR): 24 a 48 horas.
Coste de la prueba:
Consultar a ivami@ivami.com