Displasia ósea esclerosante relacionada con SOST (Esclerosteosis y Enfermedad de Van Buchem) (SOST-related sclerosing bone displasia) - Gen SOST           

La displasia ósea esclerosante relacionada con SOST es una alteración del desarrollo óseo caracterizada por hiperostosis. Como consecuencia de la hiperostosis, los huesos de todo el organismo son más densos y extensos de lo normal, especialmente los huesos del cráneo.

Los signos y síntomas derivados de la displasia ósea esclerosante relacionada con SOST suelen incluir una mandíbula agrandada con dientes mal alineados; hipoplasia del tercio medio facial; proptosis ocular; y una frente prominente. Con frecuencia, estos individuos tienen cefaleas debido a que el aumento del grosor de los huesos del cráneo incrementa la presión en el cerebro. La hiperostosis parece ocurrir durante toda la vida, por lo que las características esqueléticas tienden a ser más pronunciadas con el tiempo. Sin embargo, el crecimiento excesivo del hueso puede ocurrir solamente en ciertas áreas. Además, el crecimiento anormal óseo puede comprimir los nervios craneales, lo que puede dar lugar a parálisis del nervio facial, pérdida de la audición, pérdida de visión, hiposmia o anosmia. El crecimiento óseo anormal puede provocar complicaciones potencialmente fatales si se comprime el tronco cerebral.

Existen dos formas de displasia ósea esclerosante relacionada con SOST: la esclerosteosis y la enfermedad de Van Buchem. Las dos formas se distinguen por la gravedad de sus síntomas. La esclerosteosis es la forma más grave de la enfermedad. Con frecuencia, estos individuos tienen sindactilia. Mientras que la sindactilia es congénita, las características del esqueleto suelen aparecer en la primera infancia. Las personas con esclerosteosis también pueden tener deformidad o ausencia de uñas. La enfermedad de Van Buchem representa la forma más leve. Las personas con enfermedad de Van Buchem generalmente son de estatura media y no tienen sindactilia o anomalías de las uñas. Los individuos afectados suelen tener una compresión del nervio craneal menos grave, lo que deriva en  características neurológicas leves. En las personas con enfermedad de Van Buchem, las características del esqueleto suelen aparecer en la infancia o la adolescencia.

Como su nombre indica, la displasia ósea esclerosante relacionada con SOST es debida a alteraciones en la secuencia del gen SOST (sclerostin), situado en el brazo largo del cromosoma 17 (17q11.2), que codifica la proteína esclerostina. Esta proteína se codifica en los osteocitos de los huesos. La función principal de la esclerostina es inhibir la formación de hueso. Con el tiempo, el mantenimiento óseo requiere un equilibrio entre la formación de nuevo tejido óseo y la resorción. La inhibición de la formación ósea es necesaria para asegurar que los huesos son de la forma, tamaño y densidad correcta. Los estudios sugieren que la esclerostina ejerce sus efectos interfiriendo con la señalización Wnt, que desempeña un papel clave en la regulación de la formación ósea. Además, la esclerostina puede promover la apoptosis de las células óseas, inhibiendo aún más el crecimiento óseo.

Se han descrito al menos seis mutaciones en o cerca del gen SOST en las personas con esta enfermedad. La mayoría de las mutaciones que dan lugar a esclerosteosis provocan una señal de parada prematura en la codificación de esclerostina. Estas mutaciones inhiben la síntesis de cualquier proteína funcional. La mutación más común responsable de la enfermedad de Van Buchem en personas de ascendencia holandesa es una deleción de 52.000 nucleótidos en una región de ADN del gen SOST. Esta región, denominada región reguladora, normalmente controla la expresión del gen. Esta deleción dentro de la región de regulación reduce la expresión del gen SOST, lo que lleva a una deficiencia de proteína esclerostina funcional. La deficiencia o ausencia de esclerostina en las células óseas interrumpe el efecto inhibidor de la proteína sobre el crecimiento óseo, provocando una formación ósea excesiva. Como consecuencia, los huesos son más densos y extensos de lo habitual, en particular los huesos del cráneo. Estas anomalías óseas son características de la displasia ósea esclerosante relacionada con SOST.

Esta enfermedad se hereda con un patrón autosómico recesivo, lo que significa que ambas copias del gen en cada célula deben tener las mutaciones para que se exprese la alteración. Los padres de un individuo con una enfermedad autosómica recesiva tienen una copia del gen mutado, pero por lo general no muestran signos y síntomas de la enfermedad.

Pruebas realizadas en IVAMI: en IVAMI realizamos la detección de mutaciones asociadas  con displasia ósea esclerosante relacionada con SOST, mediante la amplificación completa por PCR de los exones del gen SOST, y su posterior secuenciación.

Muestras recomendadas: sangre extraída con EDTA para separación de leucocitos sanguíneos, o tarjeta impregnada con muestra de sangre desecada (IVAMI puede enviar por correo la tarjeta para depositar la muestra de sangre).