Contractura de Dupuytren (Dupuytren contracture) - Genes C8orf34, EPDR1, RSPO2, SFRP4, SULF1, WNT2, WNT4 y WNT7B 

La contractura de Dupuytren (también conocida como enfermedad de Dupuytren, fibromatosis palmar familiar o fibromatosis palmar fascial) es una deformidad de la mano en la que las articulaciones de uno o más dedos pueden llegar a estar flexionadas permanentemente. Esta alteración afecta con mayor frecuencia a varones mayores de 50 años. En las mujeres, es cuatro veces menos frecuente, y también tiende a aparecer más tarde y ser menos grave. Sin embargo, la contractura de Dupuytren puede ocurrir en cualquier momento de la vida, incluso en la infancia. Esta alteración puede hacer que sea más difícil para las personas afectadas realizar tareas manuales, como la preparación de alimentos, escribir o tocar instrumentos musicales. En aproximadamente la mitad de los casos, la contractura de Dupuytren se produce en una sola mano, afectando a la mano derecha dos veces más que a la izquierda.

La contractura de Dupuytren se desarrolla a consecuencia de un acortamiento y engrosamiento del tejido fibroso bajo la piel de la palma de la mano (fascia palmar). En la contractura de Dupuytren el engrosamiento de la fascia normalmente aparece por primera vez como uno o más nódulos duros pequeños que se pueden ver y sentir bajo la piel de la palma de la mano. En algunos individuos afectados, los nódulos siguen siendo el único signo de la enfermedad, y en ocasiones incluso desaparecen sin tratamiento; sin embargo en la mayoría de los casos, la afección empeora gradualmente. Durante meses o años, el tejido fibroso anormal se hace más corto y más grueso, convirtiéndose en bandas estrechas de tejido denominadas cordones. Estos cordones curvan poco a poco los dedos afectados hacia la palma. A medida que la enfermedad progresa, se hace difícil o imposible extender los dedos afectados, dando lugar a la contractura asociada a este proceso. El dedo afectado con mayor frecuencia es el anular, seguido del dedo meñique, corazón e índice. En ocasiones, el pulgar también se ve afectado.

La contractura de Dupuytren no suele ser dolorosa, pero en algunos casos las personas afectadas padecen inflamación de las articulaciones, sensación de ardor o picazón y, presión o tensión especialmente cuando se trata de extender las articulaciones afectadas. Las personas con contractura de Dupuytren tienen mayor riesgo de desarrollar otras alteraciones en las que ciertas anomalías similares del tejido conectivo afectan a otras partes del organismo. Estos incluyen las almohadillas de Garrod, que son nódulos que se desarrollan en los nudillos; la enfermedad de Ledderhose, también conocida como fibromatosis plantar, en el que las contracturas afectan a los pies; y, en los varones, la enfermedad de Peyronie, que provoca la curvatura anormal del pene.

Aunque se desconoce la causa de la contractura de Dupuytren, se cree que los cambios en varios genes afectan el riesgo de desarrollar esta afección. Algunos de estos genes incluyen el gen C8orf34 (chromosome 8 open reading frame 34), situado en el brazo largo del cromosoma 8 (8q13); EPDR1 (ependymin related 1), situado en el brazo corto del cromosoma 7 (7p14.1); RSPO2 (R-spondin 2), situado en el brazo largo del cromosoma 8 (8q23.1); SFRP4 (secreted frizzled related protein 4), situado en el brazo corto del cromosoma 7 (7p14.1); SULF1 (sulfatase 1), situado en el brazo largo del cromosoma 8 (8q13.2); WNT2 (Wnt family member 2), localizado en el brazo largo del cromosoma 7 (7q31.2); WNT4 (Wnt family member 4), situado en el brazo corto del cromosoma 1 (1p36.23-p35.1); y WNT7B (Wnt family member 7B), situado en el brazo largo del cromosoma 22 (22q13).

Algunos de estos genes están implicados en la vía de señalización de Wnt. Esta vía promueve el crecimiento y la proliferación celular y está implicada en la diferenciación de las células. La proliferación y diferenciación anormal de los fibroblastos es clave en el desarrollo de la contractura de Dupuytren. La fascia palmar de las personas con este proceso tiene un exceso de miofibroblastos. Las miofibrillas normalmente forman la unidad básica de las fibras musculares, lo que permite que se contraigan. El aumento del número de miofibroblastos provoca una contracción anormal de la fascia y se produce un exceso de colágeno tipo III. Es probable que la combinación de una contracción anormal y un exceso de colágeno de tipo III sean responsables del acortamiento y engrosamiento de la fascia que se produce en la contractura de Dupuytren; sin embargo, no se sabe cómo los cambios en los genes que afectan a la vía de señalización Wnt están relacionados con estas anomalías y cómo contribuyen al riesgo de desarrollar este proceso. Otros factores de riesgo para el desarrollo de la contractura de Dupuytren puede incluir el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol, enfermedad hepática, la diabetes, el colesterol alto, los problemas de tiroides, ciertos medicamentos como los utilizados para tratar la epilepsia y, una lesión previa en la mano. Se cree que la mayor prevalencia de la enfermedad en los varones en comparación con las mujeres es debida a la sensibilidad de la fascia a los andrógenos.

Además de ciertas variaciones genéticas, otros factores de riesgo que dan lugar al desarrollo de la contractura de Dupuytren pueden incluir fumar; consumo excesivo de alcohol; enfermedad del hígado; diabetes; colesterol alto; problemas tiroideos; ciertos medicamentos como los anticonvulsivos; y lesión previa en la mano.

La contractura de Dupuytren generalmente se transmite de padres a hijos y es la afección hereditaria más frecuente del tejido conectivo. Sin embargo, el patrón de herencia en la mayoría de los casos no está claro. Algunas personas que heredan cambios genéticos asociados con la contractura de Dupuytren nunca desarrollan la enfermedad. En algunas familias, este proceso parece tener una herencia autosómica dominante, lo que significa que una copia de un gen alterado en cada célula es suficiente para expresar el proceso. En estos casos, una persona afectada por lo general tiene un progenitor afectado. En otras familias, la afección parece ser heredada con un patrón mitocondrial, también conocido como herencia materna. Este patrón de herencia se aplica a genes contenidos en el ADNmt. Dado que las células del óvulo, pero no las células de esperma, contribuyen con las mitocondrias al desarrollo del embrión, los niños pueden heredar alteraciones que derivan de mutaciones en el ADNmt sólo de su madre. Estas alteraciones pueden aparecer en todas las generaciones de una familia y pueden afectar tanto a varones como a mujeres, pero los padres no transmiten rasgos asociados con los cambios en el ADNmt a sus hijos. En algunos casos, la contractura de Dupuytren no se hereda y ocurre en personas sin antecedentes de la enfermedad en su familia. Estos casos esporádicos tienden a comenzar más tarde y ser menos graves que los casos familiares.

Pruebas realizadas en IVAMI: en IVAMI realizamos la detección de mutaciones asociadas con la contractura de Dupuytren, mediante la amplificación completa por PCR de los exones de los genes C8orf34, EPDR1, RSPO2, SFRP4, SULF1, WNT2, WNT4 y WNT7B, respectivamente, y su posterior secuenciación.

Muestras recomendadas: sangre extraída con EDTA para separación de leucocitos sanguíneos, o tarjeta impregnada con muestra de sangre desecada (IVAMI puede enviar por correo la tarjeta para depositar la muestra de sangre).